lunes, 1 de diciembre de 2008

LA MUJER TRAÍDA POR EL VIENTO

[...] Noin kuulin saneltavaksi, tiesin virttä tehtäväksi:
yksin meillä yöt tulevat, yksin päivät valkeavat;
yksin syntyi Väinämöinen, ilmestyi ikirunoja
kapehesta kantajasta, Ilmattaresta emosta.

Olipa impi, ilman tytö, kave Luonnotar korea.
Piti viikoista pyhyyttä, iän kaiken impeyttä
ilman pitkillä pihoilla, tasaisilla tanterilla.

Ikävystyi aikojansa, ouostui elämätänsä,
aina yksin ollessansa, impenä eläessänsä
ilman pitkillä pihoilla, avaroilla autioilla

Jop' on astuiksen alemma, laskeusi lainehille,
meren selvälle selälle, ulapalle aukealle.
Tuuli suuri tuulen puuska, iästä vihainen ilma;
meren kuohuille kohotti, lainehille laikahutti.

Tuuli neittä tuuitteli, aalto impeä ajeli
ympäri selän sinisen, lakkipäien lainehien:
tuuli tuuli kohtuiseksi, meri paksuksi panevi.

Kantoi kohtua kovoa, vatsantäyttä vaikeata
vuotta seitsemän satoa, yheksän yrön ikeä;
eika synny syntyminen, luovu luomatoin sikiö.

Vieri impi veen emona. Uipi iät, uipi lännet,
uipi luotehet, etelät, uipi kaikki ilma rannat
tuskissa tulissen synnyn, vatsanvaivoissa kovissa;
eikä synny syntyminen, luovu luomatoin sikiö.

Itkeä hyryttelevi; sanan virkkoi, noin nimesi:
"Voi poloinen, päiväni, lapsi kurja, kulkuani!
Jo olen joutunut johonki: iäkseni ilman alle, 
tuulen tuuiteltavaksi, aaltojen ajeltavaksi
näillä väljillä vesillä, lake'illa lainehilla!

"Parempi olisi ollut ilman impenä eleä,
kuin on nyt tätä nykyä vierähellä veen emona:
vilu tääll' on ollakseni, vaiva värjätelläkseni,
aalloissa asuakseni, veessä vierielläkseni. [...]
________________________________

[...] Es esto lo que se contaba,
lo que escuché en otros tiempos:
Las noches sucedíanse solas,
despuntaban solos los días.
El justo y sabio Väinämöinen
se presentó solo en el mundo,
el bardo eterno apareció,
hijo de una divina madre,
pues de Ilmatar nació, la virgen.

Una doncella había en el aire, 
la esplendorosa Luonnotar,
que pura y virgen se mantuvo
mucho tiempo, que en castidad
vivió en el fondo de las grandes
corrientes de aire, en las llanuras
inacabables de los cielos.
Pero acabó por aburrirse,
por ver su vida sin objeto;
sentíase muy solitaria
viviendo siempre casta y pura
del aire entre las corrientes,
en los espacios infinitos.

Por fin se decidió a bajar
y se posó en las grandes olas,
en el brillante, undoso lomo
del mar. Llegó un golpe de viento,
una gran tempestad de oriente
que todo el mar cubrió de espumas,
olas enormes levantando.
Acunó el viento a la doncella,
las grandes olas la mecieron
sobre sus crestas azuladas;
el viento fecundó su seno,
quedó preñada de la ola.

Ella llevó su dura carga,
el peso de su hinchado vientre
durante setecientos años
o las nueve edades del hombre;
mas no podía parir, el feto
del vientre no se separaba.

Madre del mar, vagó la virgen,
nadó hacia oriente y occidente,
nadó hacia el norte y hacia el sur,
hacia todo el amplio horizonte,
sintiendo arderle las entrañas,
sufriendo todos los dolores.
Sollozó dulcemente y luego
habló y dijo: "Desdichada,
¿qué será de mi vida?, ¿cuál
será mi suerte, pobre niña?
Veo muy claro mi destino:
bajo el profundo cielo siempre,
seré acunada por el viento, 
siempre al capricho de las olas
en estas anchas aguas, siempre
errando por el mar inmenso.
Hubiérame valido más
vivir del aire como hija
que errar, como estoy haciendo,
cual madre de las vastas olas, 
flotar sin pausa sobre el agua. [...]

(Fragmento del Canto I del Kalevala, recopilado por Elias Lönnrot)


martes, 25 de noviembre de 2008

AMORES QUE MATAN



HENRY LEE

Get down, get down, little Henry Lee
And stay all night with me
You won't find a girl in this damn world
That will compare with me
And the wind did howl, and the wind did blow
La la la la la la
La la la la la lee
A little bird lit down on Henry Lee

I can't get down and I won't get down
And stay all night with thee
For the girl I have in that merry green land
I love far better than thee
And the wind did howl, and the wind did blow
La la la la la la
La la la la la lee
A little bird lit down on Henry Lee

She leaned herself against a fence
Just for a kiss or two
And with a little pen-knife held in her hand
She plugged him through and through
And the wind did roar, and the wind did moan
La la la la la la
La la la la la lee
A little bird lit down on Henry Lee

Come, take him by his white-lilly hands
Come, take him by his feet
And throgh him in this deep deep wellW
Which is more than one hundred feet
And the wind did howl, and the wind did blow
La la la la la la
La la la la la lee
A little bird lit down on Henry Lee

Lie there, lie there, little Henry Lee
Till the fresh drops from your bones
For the girl you have in that merry green land
Can wait forever for you to come home
And the wind did howl, and the wind did blow
La la la la la la
La la la la la lee
A little bird lit down on Henry Lee

_________
HENRY LEE

Acuéstate, acuéstate, pequeño Henry Lee
Y pasa toda la noche conmigo
Porque no encontrarás una muchacha en este maldito mundo
Que se compare conmigo
Y el viento aullaba, y el viento soplaba
La la la la la la
La la la la la lee
Un pajarillo se apagó sobre Henry Lee

Yo no puedo acostarme y no me acostaré
Ni pasaré toda la noche contigo
Porque a la chica que tengo en esa sagrada tierra verde
La quiero mucho más y mejor que a ti
Y el viento aullaba, y el viento soplaba
La la la la la la
La la la la la lee
Un pajarillo se apagó sobre Henry Lee

Ella se apoyó en una valla
Sólo para un beso o dos
Y con una navajita que sostenía en la mano
Le atravesó una y otra vez
Y el viento rugía y el viento gemía
La la la la la la
La la la la la lee
Un pajarillo se apagó sobre Henry Lee

Venga, cógelo por sus manos blancas de azucena
Venga, cógelo por los pies
Y arrójalo a ese pozo tan tan hondo
que tiene más de treinta metros
Y el viento aullaba, y el viento soplaba
La la la la la la
La la la la la lee
Un pajarillo se apagó sobre Henry Lee

Yace ahí, yace ahí, pequeño Henry Lee
Hasta que la carne te gotee de los huesos
Pues la muchacha que tienes en esa sagrada tierra verde
Puede esperar para siempre a que vuelvas a casa
Y el viento aullaba, y el viento soplaba
La la la la la la
La la la la la lee
Un pajarillo se apagó sobre Henry Lee.

martes, 18 de noviembre de 2008

BESTIARIO

LA BANSHEE

Nadie parece haberla visto; es menos una forma que un gemido que da horror a las noches de Irlanda y (según la Demonología y Hechicería de Sir Walter Scott) de las regiones montañosas de Escocia. Anuncia, al pie de las ventanas, la muerte de algún miembro de la familia. Es privilegio peculiar de ciertos linajes de pura sangre celta, sin mezcla latina, sajona o escandinava. La oyen también en Gales y en Bretaña. Pertenece a la estirpe de las hadas. Su gemido lleva el nombre de keening.


LOS GNOMOS

Son más antiguos que su nombre, que es griego, pero que los clásicos ignoraron, porque data del siglo XVI. Los etimólogos lo atribuyen al alquimista suizo Paracelso, en cuyos libros aparece por vez primera.
Son duendes de la tierra y de las montañas. La imaginación popular los ve como enanos barbudos, de rasgos toscos y grotescos; usan ropa ajustada de color pardo y capuchas monásticas. A semejanza de los grifos de la superstición helénica y oriental, y de los dragones germánicos, tienen la misión de custodiar tesoros ocultos.
Gnosis, en griego, es "conocimiento"; se ha conjeturado que Paracelso inventó la palabra "gnomo" porque éstos conocían, y podían revelar a los hombres el preciso lugar en que los metales estaban escondidos.


HAOKAH, DIOS DEL TRUENO

Entre los indios sioux, Haokah usaba los vientos como palillos para que resonara el tambor del Trueno. Sus cuernos demostraban que era también dios de la caza. Lloraba cuando estaba contento; reía cuando triste. Sentía el frío como calor y el calor como frío.


EL KRAKEN

El Kraken es una especie escandinava del zaratán y el dragón de mar o culebra de mar de los árabes.
En 1752, el dinamarqués Eric Pontoppidan, Obispo de Bergen, publicó una Historia natural de Noruega, obra famosa por su hospitalidad o credulidad; en sus páginas se lee que el lomo del Kraken tiene una milla y media de longitud y que sus brazos pueden abarcar el mayor navío. El lomo sobresale como una isla; Eric Pontoppidan llega a formular esta norma: "Las islas flotantes son siempre Krakens." Asimismo escribe que el Kraken suele enturbiar las aguas del mar con una descarga de líquido; esta sentencia ha sugerido la conjetura de que el Kraken es una magnificación del pulpo.
Entre las piezas juveniles de Tennyson, hay una dedicada al Kraken. Dice, literalmente, así:
"Bajo los truenos de la superficie, en las honduras del mar abismal, el Kraken duerme su antiguo, no invadido sueño sin sueños. Pálidos reflejos se agitan alrededor de su oscura forma; vastas esponjas de milenario crecimiento y altura se inflan sobre él, y en lo profundo de la luz enfermiza, pulpos innumerables y enormes baten con brazos gigantescos la verdosa inmovilidad, desde secretas celdas y grutas maravillosas. Yace ahí desde siglos, y yacerá, cebándose dormido de inmensos gusanos marinos hasta que el fuego del Juicio Final caliente el abismo. Entonces, para ser visto una sola vez por hombres y por ángeles, rugiendo surgirá y morirá en la superficie."


LOS LAMED WUFNIKS

Hay en la tierra, y hubo siempre, treinta y seis hombres rectos cuya misión es justificar el mundo ante Dios. Son los Lamed Wufniks. No se conocen entre sí y son muy pobres. Si un hombre llega al conocimiento de que es un Lamed Wufnik muere inmediatamente y hay otro, acaso, en otra región del planeta, que toma su lugar. Constituyen, sin sospecharlo, los secretos pilares del universo. Si no fuera por ellos. Dios aniquilaría al género humano. Son nuestros salvadores y no lo saben.
Esta mística creencia de los judíos ha sido expuesta por Max Brod.
La remota raíz puede buscarse en el capítulo dieciocho del Génesis, donde el Señor declara que no destruirá la ciudad de Sodoma, si en ella hubiere diez hombres justos.
Los árabes tienen un personaje análogo, los Kutb.

© Jorge Luis Borges con Margarita Guerrero, El libro de los seres imaginarios

lunes, 17 de noviembre de 2008

CUADERNOS DE UN MAMÍFERO

CHIQUILLADAS PINTORESCAS

I. BREVE PRELUDIO DEL DÍA

Despertarse bien.
Comportarse bien.
Peinarse bien.
Mirarse bien.
Portarse bien.
Pasearse bien.
Encontrarse bien.


II. NANA

El día ha acabado, Pedrito va a acostarse.
Ha sido muy pero que muy bueno.
Su madre le besa.
Se mete en la cama contento consigo mismo y dice:
"El abuelito y la abuelita
¿sabrán que he sido tan bueno?"
"Sí" responde mamá.
"¿Quién se lo dirá?"
"Lo verán en el periódico"
Pedrito se duerme, lleno de orgullo.


III. MARCHA DE LA LARGA ESCALERA

Es una escalera larga, muy larga.
Tiene más de mil peldaños, todos de marfil.
Es preciosa.
Nadie se atreve a usarla por miedo a estropearla.
Ni siquiera el mismísimo rey la ha usado nunca.
Para salir de su cuarto,
salta por la ventana.
Por eso, dice con frecuencia:
"Me gusta tanto esta escalera
que la haré disecar."
¿No tiene razón el rey?


CAPÍTULOS QUE PUEDEN GIRARSE HACIA CUALQUIER LADO

I. LA QUE HABLA DEMASIADO

"Déjame hablar.
Escúchame."
Interior de buena gente.
Las bellezas de la existencia y de los grandes almacenes.
La mujer le dice a su marido:
"Me apetece un sombrero de caoba maciza.
La señora Fulana de Tal tiene un paraguas hecho de hueso.
Déjame hablar.
La señorita Mengana se va a casar con un hombre
que está seco como un cuco."
"Pues escúchame."
Él muere extenuado.


II. EL TRANSPORTADOR DE PEDRUSCOS

Los lleva a la espalda.
Su aspecto es socarrón y lleno de firmeza.
Su fuerza asombra a los niños. Lo vemos
entonces transportar una piedra enorme,
cien veces más grande que él
(es una piedra pómez)

Con un gran esfuerzo,
penosamente, a tirones,
arrastrando las piernas.
Siente que la piedra se le escapa:
se le va a caer.
Ya está: se le cae.


III. LAMENTO DE LOS PRISIONEROS (JONÁS Y LATUDE)

Están sentados a la sombra.
Reflexionan.
Varios siglos les separan.
Jonás dice: "Yo soy el Latude marinero."
Latude dice: "Yo soy el Jonás francés."
Esto huele a cerrado, según ellos.
Les parece ver al bueno y viejo sol.
Sólo piensan en salir.


LA INFANCIA DE KO-QUO 
(RECOMENDACIONES MATERNAS)

I. NO TE BEBAS EL CHOCOLATE CON LOS DEDOS

Espera a que se enfríe un poco.
¿Ves? Ya te has quemado la lengua.
–No, mamá: me he tragado la cucharilla.


II. NO TE SOPLES EN LOS OÍDOS

Eres insoportable.
No me pises.
Contigo hay que tener una paciencia de caballo.


III. NO TE METAS LA CABEZA BAJO EL BRAZO

Si tomas el hábito de comportarte,
llegarás tal vez a ser mariscal.
Y a saber si una bala no se te llevará la cabeza.
¡Es lo que conviene a un chico!
Serás un inválido de cabeza de madera.

© Erik Satie

martes, 11 de noviembre de 2008

SOBRE LA GUERRA Y LA PAZ

CRISIS MUNDIAL Y LIBROS

Contestación a una encuesta en 1937

Naturalmente, hay una gran cantidad de libros buenos y hermosos a los que deseo una gran difusión. Pero no hay libros de cuya influencia pudiera esperarse un mejoramiento de las circunstancias y una configuración más amable del futuro. La crisis en que se encuentra nuestro mundo será, me temo, muy parecida al exterminio, aunque no llegue a serlo, y en su transcurso, además de muchas otras cosas hermosas y queridas, desaparecerán para siempre innumerables libros. Lo que ayer era aún sagrado, lo que aún hoy sigue siendo venerable e irrenunciable para un reducido círculo de intelectuales, estará pasado mañana totalmente enterrado y olvidado, a excepción de aquel resto que es indestructible y constituye la levadura de cualquier reproducción. Esto no perecerá jamás mientras existan seres humanos; es lo único "eterno" que posee el hombre.
Esta posesión, la más elevada de la humanidad, aparece formulada en diversas formas y lenguas, en la Biblia, en los libros sagrados de la antigua China, en los Vedanta hindúes; y en muchos otros libros y bibliotecas está contenido y ha encontrado forma lo poco que hasta ahora se conoce realmente. Esta forma no es unívoca y estos libros no son eternos, pero contienen la herencia espiritual de toda nuestra historia. Toda la otra literatura procede de ellos y sin ellos no existiría: por ejemplo, toda la poesía cristiana, hasta Dante y hasta hoy, es una irradiación del Nuevo Testamento, y si el conjunto de esta literatura desapareciese y el Nuevo Testamento fuera conservado, siempre podrían derivarse de él literaturas nuevas y similares. Solamente estos pocos "libros sagrados" de la humanidad tienen esta potencia generativa, y sólo ellos sobreviven a los milenios a las crisis mundiales. Es un consuelo saber que su difusión no hace al caso. No es necesario que sean millones o centenares de miles los que hayan poseído este o aquel libro sagrado, o mejor aún, que hayan sido poseídos por él: unos pocos son suficientes. 

© Hermann Hesse

sábado, 8 de noviembre de 2008

VICIOS, PECADOS Y ENFERMEDADES MORALES

CONDESCENDENCIA

El DRAE explica que "condescender es acomodarse por bondad al gusto y voluntad del otro", lo que, aun siendo cierto, deja a un lado toda la carga viciosa de esta acción. La condescendencia viciosa tiene más bien que ver con el paternalismo, la arrogante superioridad de quien transige magnánimamente con la voluntad o deseo del favorecido, como muestra de su bondad (y, de paso, farisaica certificación pública de su santidad y benévola superioridad). Emparentada así con las condescendencia viciosa está la clemencia también viciosa que en palabras de La Rochefoucauld, "se practica unas veces por vanidad, otras por pereza, a menudo por temor y casi siempre por las tres cosas a la vez" (Maximes, 16)


COTILLEO

Cotillear es sinónimo de chismorrear: contarse chismes mutuamente varias personas (DRAE). Es uno de los vicios nacionales españoles más arraigados. Este vicio se imputa tradicionalmente a los colectivos de mujeres y porteras, que según ello tendrían una inveterada afición al chisme, la divulgación de rumores y la insinuación malediciente. Es también característico de las culturas cerradas y del entorno rural en general, y signo de un alto grado de control social. También es endémico en las comunidades de vecinos, donde se inserta en la dinámica de la envidia, la maledicencia y la injuria, muchas veces en pago de ofensas o rivalidades reales o imaginarias. Como el cotilleo se refiere al honor de las personas, es un medio de imputación o de valoración moral (negativa) tendente a señalar una conducta o historial desviante en relación con las normas del grupo. Se caracteriza por un alto grado de subjetivismo, tendenciosidad y animosidad contra alguien: "Chismorrear es cuando oyes algo que te gusta acerca de alguien que no te gusta" (Conde Wilson).
G. Doval aporta al respecto una cita que no deja de tener una moraleja histórica o de calificar el pretendido progreso de la modernidad: "En tiempos de los bárbaros, la gente combatía con hachas. Los hombres civilizados han abandonado el hacha, y ahora luchan con cotilleos" (E. W. Howe, cit. por Doval, 1996, 9)


DILETANTISMO

El diletante es el aficionado, el amateur, que cultiva un oficio o arte sin una dedicación profesional o un reconocimiento gremial para ello. Se le acusa de frivolidad, de heterodoxia, pero en muchos casos es un obvio exponente de libertad y originalidad. Su opuesto es el profesional, recibido y admitido en el corpus, y tutelado como tal en consecuencia. La defensa del diletantismo como la de la polimathía, reconoce en él un espíritu curioso, tentativo y enemigo de las grandes certezas, que con frecuencia encubren errores ciertos.


ECOLOGISMO FUNDAMENTALISTA

Savater, en línea con C. Rosset (La antinaturaleza) [1] y L. Ferry (El nuevo orden ecológico), distingue entre "ecología" y "ecolatría". Mientras lo primero es una defensa y tutela del medio ambiente, del equilibrio ecológico y del desarrollo sostenible, lo último es una perversión –por exageración– del naturalismo: no se pueden poner en un mismo plano los derechos de los vegetales y los derechos del animal que los derechos humanos. Para la perspectiva ecolátrica "lo importante –escribe Savater– no es salvar ciertos recursos o especies naturales que necesitamos, sino humillar al hombre –más específicamente, al hombre moderno y occidental– y ponerle en su sitio, es decir, bien abajo del sabio orden natural al que debe someterse". Hay aquí, como se ve, una cierta misantropía, en algunos casos de origen religioso, una genealogía ideológica patente en la eco-religión devenida culto y castigo a la maldad del hombre urbano.
La denuncia del ecologismo fundamentalista es, además de la de aquella pseudorreligión, la denuncia del peligro del Estado eco-fiscal, con una presión fiscal creciente y una política exponencialmente represiva a las agresiones a la naturaleza, decididas por un grupo de "expertos"; y del estado eco-policial, donde cada uno de nuestros actos cotidianos está tasado, reglamentado y sujeto a la observación del "ojo escrutador que todo lo ve" en materia de agresión medioambiental [2]. Bajo la laudable premisa de que hay que eliminar hábitos de consumo nocivos, la eco-moral, que empezó con nobles fines naturalistas, está llamada a convertirse en una fabulosa instancia de control de nuestras vidas y opciones, y su revolución moral en un régimen panóptico de expertos que deciden lo que nos conviene más allá de nuestros deseos i.e., el Big Eco-Brother. Hay en el ecologismo fundamentalista un motivo romántico-conservador de "vuelta la naturaleza", odio a la artificiosidad de la cultura urbana y de rechazo de la técnica. Cuando esta actitud se asocia al vegetarianismo, a la medicina alternativa, a la political correctness y otras formas de inquisición y censura (lucha contra el tabaco y el alcohol, contra los coches, contra [toda/la] televisión, etc.) entramos ya de hoz y coz en el meollo ideológico del ecologismo fundamentalista: una reacción antiilustrada, antimoderma, sectaria y represiva que esconde bajo el lírico motivo del beatus ille una actitud agraria y regresiva, aunque no deja de tener ilustres antecesores: recuérdese que el bucólico Rousseau fue el mentor ideológico de Robespierre. "El asco de la modernidad, que es de todas las épocas, es quizás la constante más significativa del naturalismo, del que revela el tormento secreto y generalmente no confesado [...]; "la ideología naturalista puede ser así considerada como la ideología religiosa llegada a la edad adulta, encontrando en la idea de naturaleza confirmación y consolidación de sus presupuestos de base" (C. Rosset). Que en el eco-fundamentalismo late un resorte antimoderno parece claro. Lo difícil está en conciliar una política ecológica sensata con un bienestar razonable y consensuado  por los ciudadanos; está bien, como exigencia ética, e incluso como imperativo de eficiencia, preservar la naturaleza para las generaciones venideras, pero este noble motivo ha de limitarse con otro: no imponer al dictado una teoría de las necesidades franciscana ni convertir la defensa del campo en la defensa del campo de concentración.
___
[1] El libro de Ferry ofrece una crítica al fundamentalismo ecologista (que aduce en su apoyo incluso posiciones de Greenpeace)
[2] Entre las prácticas de educación ambiental he registrado en Suiza las más singular: la que recoge el imperativo "denuncia a tu vecino eco-remiso"; la posibilidad de que la policía ecológica nos imponga una multa –tras revisar de oficio el contenido de nuestra basura– por infracción de las ordenanzas respecto al tamaño de las bolsas de basura no es una mera posibilidad o un caso ficitico de Fahrenheit-2; fue un hecho realmente sucedido, recogido por La Tribune de Génève en mayo de 1995.

© Jorge Vigil Rubio, Diccionario razonado de vicios, pecados y enfermedades morales


domingo, 2 de noviembre de 2008

CON PIES DE GATO

EN EL BARRIO CHINO

Yo te espero
bajo los signos rotos
del cine cantonés
Yo te espero
en el humo amarillo
de una estirpe deshecha

Yo te espero
en la zanja donde navegan
ideogramas negros
que ya no dicen nada

Yo te espero a las puertas
de un restaurante
en un set de la Paramount
para una película que se filma a diario

Dejo que la lluvia me cubra
con sus raíles de punta
mientras presiento tu llegada

En compañía de un coro de eunucos,
junto al violín de una sola cuerda
de Li Tai Po,
yo te espero

Pero no vengas
porque lo que yo quiero realmente
es esperarte


OFICIO DE ÁNGEL

  UN PIANO NEGRO de cola sin pedales, con las teclas amarillas y atestado de marcos de plata con fotos de toda la familia. Un piano solo en un rincón de la sala, un piano viejo obstruyendo el paso. Un piano que nadie se atreve a tocar, que tampoco se vende. Un piano en cuya banqueta de torniquete gira un gato barcino. Un piano que se fue desmoronando virgen, sin ser estrenado por unas manos jóvenes y ágiles. Un pobre piano clamando por una muchacha de pelo largo que tocara en él el Claro de Luna de Débussy y Muñeca de Cristal de Ernesto Lecuona. Un regalo de bodas para una familia de diplomáticos y oficinistas. Un piano junto a una ventana de hierro, detrás de un enorme cristal para que todos lo vieran y dijeran, ¡qué piano más bonito el de la familia que vive al lado de los Vinagreras! Un piano cubierto por un mantón de Manila. Un piano para un cuento de Felisberto Hernández. Un piano al que nadie quiso, un piano abandonado, un piano soltero, un piano nacido con mala estrella, un piano sin horóscopo, sin efemérides, sin Tarot. Un piano que pudo haber sido sustituido por una consola, por un gramófono, por un butacón. Un piano lleno de comején. Un piano náufrago de sí mismo. Un piano solo.


CON PIES DE GATO

El viento ha quemado mi pelo,
el viento frío, arrasador
Con pies de gato camino en lo oscuro
Cautelosamente, como una fiera prevenida
me acerco a tu corazón
El olfato y la noche son mi brújula
Como no sabes que existo te expones
al desamparo y al susto
Después de todo eres más frágil
que el estambre
y no sabes huir
Entre tú y yo se cierne sólo la lluvia
que espejea tus brazos
No puedes verme porque voy cubierto de árboles
La noche, pródiga de mis sueños, me juega de nuevo
una mala pasada
Feroz, bebo de tu desnudez hasta que mis labios
se sequen o se olviden
Ojalá que una flecha te atraviese el corazón
para rehacerte a mi imagen, para resucitarte
No culpo a la noche de tu aparición
sino a sus duendes


BOCETOS DE HAIKU

Soy el espejo roto
que busca un rostro
que nunca ha visto

He comprado un elefante
ahora sólo busco quien me venda
una cristalería

Soy también el viajero
que llega al andén
con el abrigo roto


POESÍAS INÉDITAS

MEMORANDUM I

Papeles que vuelan sobre papeles
Puertas que se abren y se cierran
Teléfonos sonando, royendo, erosionando
la vastedad del día
Tenues mecanógrafas que dejan sus pasos
en el granito, sin rumor
Un gato heráldico y más acá
el abismo ante la mesa de trabajo,
el proyecto, el memorándum
Archivaré mi corazón entre papeles
para evitar el ciego, desatado impulso
de alcanzarte

© Miguel Barnet

martes, 21 de octubre de 2008

QUE AMANEZCA Y ME VAYA

que amanezca y me vaya
soldando a escarcha la luz de mi saludo
en la sonrisa dorada de una ninfa dormida

que amanezca y me muera
haciendo trapos de tu nombre
en los harapos de mis lágrimas

subirán desde el suelo las magnolias
que desearán ser en tus senos samarcanda
mercaderes de tetuán sherpas del himalaya

que amanezca y sea lirio
en tus sandalias mojadas de blanco rocío
como el sendero de tu boca sobre mi espalda

ansia que te quiero ansia
dominada
contagiada del oscuro espanto del olivo

sombra huraña de la arena
que retuerce entre sus dedos
la tibieza de las olas que se mueren de tu playa

que amanezca y caiga tinto
el dolor sincero de no querer que te vayas
anidar morena en tu refugio de uvas pardas

volviera el cuervo de su víctima a la rama
para seguir velando
el cadáver gris de mi silencio sin alma

la última caricia del sol
sobre la lisa piel del alba

el primer rayo de luna
atrapado entre tus labios

y mis besos de telaraña

© Javier Mérida

CUANDO ES OTOÑO

cuando es otoño
revive en cada gota de mi sudor
el calor de la mañana
buscando sombra de higueras
junto a los cardos que azotan el camino

aquí
donde el berrido de las cigarras
es taranto
encuentro la sed antigua de mi nombre
picándome en los ojos
ahogando mis párpados en una siesta
con ruido de ratones por el tejado

nada es tan simple como un hule
habitado de moscas cansinas
que buscan su descanso
en los restos fríos de los platos

mientras tanto las gallinas
cacarean un aria del pasado verano

reconozco la melodía
con una rama de heno
entre mis labios tranquilos

© Javier Mérida

jueves, 9 de octubre de 2008

MANUAL DE DESTRUCCIONES

MANERA SENCILLÍSIMA DE DESTRUIR UNA CIUDAD

Se espera, escondido en el pasto, a que una gran nube de la especie cúmulo se sitúe sobre la ciudad aborrecida. Se dispara entonces la flecha petrificadora, la nube se convierte en mármol, y el resto no merece comentario

© Julio Cortázar - La vuelta al día en ochenta mundos

sábado, 27 de septiembre de 2008

MENSAJE DEL GRAN JEFE SEATTLE

El Gran Jefe Blanco de Washington nos envió un mensaje diciendo que quiere comprar nuestras tierras. El gran jefe nos envió también palabras de amistad y de buena voluntad. Esto es muy amable por su parte, pues sabemos que él no necesita nuestra amistad. Sin embargo nosotros meditaremos su oferta, pues sabemos que si no vendemos vendrán seguramente hombres blancos armados y nos quitarán nuestras tierras.

Pero, ¿cómo es posible comprar o vender el cielo o el calor de la tierra? Nosotros no comprendemos esta idea. Si no somos dueños de la frescura del aire, ni del reflejo del agua, ¿cómo podréis comprarlos?

Nosotros tomaremos una decisión. El Gran Jefe de Washington podrá confiar en lo que diga el jefe Seattle, con tanta seguridad como en el transcurrir de las estaciones del año. Mis palabras son como las estrellas, que nunca tienen ocaso.

Cada partícula de esta tierra es sagrada para mi pueblo. Cada brillante aguja de pino, cada grano de arena de las playas, cada gota de rocío de los sombríos bosques, cada calvero, el zumbido de cada insecto... son sagrados en memoria y experiencia de mi pueblo. La savia que asciende por los árboles lleva consigo el recuerdo de los pieles rojas.

Los muertos de los hombres blancos olvidan la tierra donde nacieron cuando parten para vagar entre las estrellas. En cambio, nuestros muertos no olvidan jamás esta tierra maravillosa, pues ella es nuestra madre. Somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros. Las flores perfumadas, el venado, el caballo, el gran águila, son nuestros hermanos.. Las cumbres rocosas, los prados húmedos, el calor del cuerpo de los potros y de los hombres, todos somos de la misma familia.

Por todo ello, cuando el Gran Jefe de Washington nos comunica que piensa comprar nuestras tierra exige mucho de nosotros. Dice que nos reservará un lugar donde podamos vivir agradablemente y que él será nuestro padre y nosotros nos convertiremos en sus hijos.

Pero, ¿es eso posible? Dios ama a vuestro pueblo y ha abandonado a sus hijos rojos. El envía máquinas para ayudar al hombre blanco en su trabajo y construye para él grandes poblados. Hace más fuerte a vuestro pueblo de día en día. Pronto inundaréis el país como ríos que se despeñan por precipicios tras una tormenta inesperada. Mi pueblo es como una época en regresión pero sin retorno. Somos raza distintas. Nuestros niños no juegan juntos y nuestros ancianos cuentas historias diferentes. Dios os es favorable y nosotros, en cambio, somos huérfanos.

Nosotros gozamos de alegría al sentir estos bosques. El agua cristalina que discurre por los ríos y los arroyos no es solamente agua, sino también la sangre de nuestros antepasados. Si os vendemos nuestras tierras debéis saber que son sagradas y enseñad a vuestros hijos que son sagradas y que cada reflejo fugaz del agua clara de las lagunas narra vivencias y sucesos de mi pueblo. El murmullo del agua es la voz de mis antepasados.

Los ríos son nuestros hermanos que sacian nuestra sed. Ellos llevan nuestras canoas y alimentan a nuestros hijos. Si os vendemos nuestras tierras debéis recordar esto y enseñad a vuestros hijos que los ríos son nuestros hermanos y que, por tanto, hay que tratarlos con dulzura, como se trata a un hermano.

El piel roja retrocedió siempre ante el hombre blanco invasor, como la niebla temprana se repliega en las montañas ante el sol de la mañana. Pero las cenizas de nuestros padres son sagradas, sus tumbas son suelo sagrado, y por ello estas colinas, estos árboles, esta parte del mundo es sagrada para nosotros. Sabemos que el hombre blanco no nos comprende. El no sabe distinguir una parte del país de otra, ya que es un extraño que llega en la noche y despoja a la tierra de lo que desea. La tierra no es su hermana sino su enemiga y cuando la ha dominado sigue avanzando. Deja atrás las tumbas de sus padres sin preocuparse. Olvida tanto las tumbas de sus padres como los derechos de sus hijos. Trata a su madre, la tierra, y a su hermano, el aire, como cosas para comprar y devastar, para venderlas como si fueran ovejas o cuentas de colores. Su voracidad acabará por devorar la tierra, no dejando atrás más que un desierto.

Yo no sé, pero nuestra forma de ser es diferente a la vuestra. La sola visión de vuestras ciudades tortura los ojos del piel roja. Quizá sea porque somos unos salvajes y no comprendemos. No hay silencio en las ciudades de los blancos. No hay ningún lugar donde escuchar cómo se abren las hojas de los arboles en primavera o el zumbido de los insectos. Quizá sea sólo porque soy un salvaje y no entiendo, pero el ruido de las ciudades únicamente ofende a nuestros oídos. ¿De qué sirve la vida si no podemos escuchar el grito solitario del chotacabras, ni las querellas nocturnas de las ranas al borde de la charca? Soy un piel roja y nada entiendo, pero nosotros amamos el rumor suave del viento, que acaricia la superficie del arroyo, y el olor de la brisa, purificada por la lluvia del medio día o densa por el aroma de los pinos.

El aire es precioso para el piel roja, pues todos los seres comparten el mismo aliento: el animal, el árbol, el hombre..., todos respiramos el mismo aire. El hombre parece no notar el aire que respira. Como un moribundo que agoniza desde hace muchos días, es insensible a la pestilencia.

Pero si nosotros o vendemos nuestras tierras no debéis olvidar que el aire es precioso, que el aire comparte su espíritu con toda la vida que mantiene. El aire dio a nuestros padres su primer aliento y recibió su última expiación. Y el aire también debe dar a nuestros hijos el espíritu de la vida. Y si nosotros os vendemos nuestras tierras, debéis apreciarlas como algo excepcional y sagrado, como el lugar donde también el hombre blanco sienta que el viento tiene el dulce aroma de las flores de las praderas.

Meditaremos la idea de vender nuestras tierras, y si decidimos aceptar, será sólo con una condición: el hombre blanco deberá tratar a los animales del país como a sus hermanos. Yo soy un salvaje y no lo entiendo de otra forma. Yo he visto miles de bisontes pudriéndose, abandonados por el hombre blanco tras matarlos a tiros desde un tren que pasaba. Yo soy un salvaje y no puedo comprender que una máquina humeante sea más importante que los bisontes, a los que nosotros cazamos tan sólo para seguir viviendo.

¿Qué sería del hombre sin los animales? Si los animales desaparecieran el hombre también moriría de gran soledad espiritual. Porque lo que le suceda a los animales, también pronto le ocurrirá al hombre. Todas las cosas están relacionadas entre sí. Lo que afecte a la tierra, afectará también a los hijos de la tierra.

Enseñad a vuestros hijos lo que nosotros hemos enseñado a nuestros hijos: la tierra es nuestra madre. Lo que afecte a la tierra, afectará también a los hijos de la tierra. Si los hombres escupen a la tierra, se escupen a si mismos. Porque nosotros sabemos esto: la tierra no pertenece al hombre, sino el hombre a la tierra. Todo está relacionado como la sangre que une a una familia. El hombre no creó el tejido de la vida, sino que simplemente es una fibra de él. Lo que hagáis a ese tejido, os lo hacéis a vosotros mismos.

El día y la noche no pueden convivir. Nuestros muertos viven en los dulces ríos de la tierra, regresan con el paso silencioso de la primavera y su espíritu perdura en el viento que riza la superficie del lago.

Meditaremos la idea del hombre blanco de comprar nuestras tierras. Pero, ¿puede acaso un hombre ser dueño de su madre? Mi pueblo pregunta: ¿qué quiere el hombre blanco? ¿Se puede comprar el aire o el calor de la tierra, o la agilidad del venado? ¿Cómo podemos nosotros venderos esas cosas, y vosotros cómo podríais comprarlas? ¿Podéis acaso hacer con la tierra lo que os plazca, simplemente porque un piel roja firme un pedazo de papel y se lo entregue a un hombre blanco? Si nosotros no poseemos la frescura del aire, ni el reflejo del agua, ¿cómo podréis comprarlos? ¿Acaso podréis volver a comprar los bisontes, cuando hayáis matado hasta el último?

Cuando todos los bisontes hayan sido sacrificados, los caballos salvajes domados, los misteriosos rincones del bosque profanados por el aliento agobiante de muchos hombres y se atiborren de cables parlantes la espléndida visión de las colinas... ¿dónde estará el bosque? Habrá sido destruido. ¿Dónde estará el águila? Habrá desaparecido. Y esto significará el fin de la vida y el comienzo de la lucha por la supervivencia.

Pero vosotros caminaréis hacia el desastre brillando gloriosamente, iluminados con la fuerza del dios que os trajo a este país y os destinó para dominar esta tierra y al piel roja. Dios os dio poder sobre los animales, los bosques y los pieles rojas por algún motivo especial. Ese motivo es para nosotros un enigma. Quizás lo comprendiéramos si supiésemos con qué sueña el hombre blanco, qué esperanza trasmite a sus hijos en la largas noches de invierno y qué ilusiones bullen en su imaginación que les haga anhelar el mañana.

Pero nosotros somos salvajes y los sueños del hombre blanco nos permanecen ocultos. Y por ello seguiremos distintos caminos, porque por encima de todo valoramos el derecho de cada hombre a vivir como quiera, por muy diferente que sea de sus hermanos.

No es mucho realmente lo que nos une. El día y la noche no pueden convivir y nosotros meditaremos vuestra oferta de comprar nuestro país y enviarnos a una reserva. Allí viviremos aparte y en paz. No tiene importancia dónde pasemos el resto de nuestros días. Nuestros hijos vieron a sus padres denigrados y vencidos. Nuestros guerreros han sido humillados y tras la derrota pasan sus días hastiados, envenenando sus cuerpos con comidas dulces y fuertes bebidas. Carecen de importancia dónde pasemos el resto de nuestros días. Ya no serán muchos, Pocas horas más quizás un par de inviernos, y ningún hijo de las grandes tribus que antaño vivían en este país y que ahora vagan en pequeños grupos por los bosques, sobrevivirán para lamentarse ante la tumba de un pueblo, que era tan fuerte y tan lleno de esperanzas como el nuestro.

Pero cuando el último piel roja haya desaparecido de esta tierra y sus recuerdos sólo sean como la sombra de una nube sobre la pradera, todavía estará vivo el espíritu de mis antepasados en estas riberas y en estos bosques. Porque ellos amaban esta tierra como el recién nacido ama el latir del corazón de su madre.

Pero ¿por qué he de lamentarme por el ocaso de mi pueblo? Los pueblos están formados por hombres, no por otra cosa. Y los hombres nacen y mueren como las olas del mar. Incluso el hombre blanco, cuyo dios camina y habla con él de amigo a amigo, no puede eludir ese destino común. Quizás seamos realmente hermanos. Una cosa si sabemos, que quizás el hombre blanco descubra algún día que nuestro Dios y el vuestro, son el mismo Dios. Vosotros quizás pensáis que le poseéis, al igual que pretendéis poseer nuestro país, pero eso no podéis lograrlo. Él es el Dios de todos lo hombres, tanto de los pieles rojas como de los blancos. Esta tierra le es preciosa, y dañar la tierra significa despreciar a su Creador

También los blancos desapareceréis, quizás antes que las demás razas. Continuad ensuciando vuestro lecho y una noche moriréis asfixiados por vuestros propios excrementos.

Nosotros meditaremos vuestra oferta de comprar nuestra tierra, pues sabemos que si no aceptamos vendrá seguramente el hombre blanco con armas y nos expulsará. Porque el hombre blanco, que detenta momentáneamente el poder, cree que ya es Dios, a quien pertenece el mundo.

Si os cedemos nuestra tierra amadla tanto como nosotros la amábamos, cuidadla tanto como nosotros la cuidamos, y conservad el recuerdo de tal como es cuando vosotros la toméis.

Y con todas vuestras fuerzas, vuestro espíritu y vuestro corazón, conservarla para vuestros hijos y amadla como Dios nos ama a todos.

Pues aunque somos salvajes sabemos una cosa: nuestro Dios es vuestro Dios. Esta tierra es sagrada. Incluso el hombre blanco no puede eludir el destino común. Quizás incluso seamos hermanos. ¡Quien sabe!


jueves, 25 de septiembre de 2008

VOLUNTADES

CÂNTICO NEGRO

"Vem por aqui" — dizem-me alguns com os olhos doces
Estendendo-me os braços, e seguros
De que seria bom que eu os ouvisse
Quando me dizem: "vem por aqui!"
Eu olho-os com olhos lassos,
(Há, nos olhos meus, ironias e cansaços)
E cruzo os braços, 
E nunca vou por ali...
A minha glória é esta:
Criar desumanidades!
Não acompanhar ninguém.
— Que eu vivo com o mesmo sem-vontade
Com que rasguei o ventre à minha mãe
Não, não vou por ai! Só vou por onde
me levam meus próprios passos...
Se ao que busco saber nenhum de vós responde
Por que me repetis: vem por aqui?

Prefiro escorregar nos becos lamacentos
Redemoinhar aos ventos,
Como farrapos, arrastar os pés sangrentos,
A ir por aí...
Se vim a o mundo, foi
Só para desflorar florestas virgens,
E desnhar meus próprios pés na areia inexplorada!
O mais que faço não vale nada.

Como, pois, sereis vós
Que me dareis impulsos, ferramentas e coragem
Para eu derrubar os meus obstáculos?...
Corre, nas vossas veias, sangue velho dos avós,
E vós amais o que é fácil!
Eu amo o Longe e a Miragem,
Amo os abismos, as torrentes, os desertos...

Ide! Tendes estradas,
Tendes jardins, tendes canteiros,
Tendes pátria, tendes tetos,
E tendes regras, e tratados, e filósofos, e sábios...
Eu tenho a minha Loucura!
Levanto-a, como un facho, a arder na noite escura, 
E sinto espuma, e sangue, e cânticos nos lábios...
Deus e o Diabo é que guiam, mais ninguém!
Todos tiveram pai, todos tiveram mãe;
Mas eu, que nunca principio nem acabo,
Nasci do amor que há entre Deus e o Diabo.

Ah, que ninguém me dê piedosas intenções,
Ninguém me peça definições!
Ninguém me diga: "vem por aqui"!
A minha vida é un vendaval que se soltou,
É uma onda que se alevantou,
É um átomo a mais que se animou....
Não sei por onde vou,
Não sei para onde vou
Sei que não vou por aí!

_____________
CÁNTICO NEGRO

"Ven por aquí" – me dicen algunos con los ojos dulces
Extendiéndome los brazos, y seguros
De que sería bueno que yo les escuchase
Cuando me dicen: "¡Ven por aquí!"
Yo les miro con ojos apagados,
(Hay en mis ojos ironías y cansancios)
Y cruzo los brazos, 
Y nunca voy por allí...
Mi gloria es esta
¡Crear inhumanidades!
No acompañar a nadie
– Yo vivo con la misma desgana
Con la que rasgué el vientre a mi madre
¡No, no voy por ahí! Solo voy por donde
Me llevan mis propios pasos...
Si a lo que busco saber ninguno de ustedes me responde
¿Por qué me repetís "¡Ven por aquí!"?

Prefiero escurrirme por los rincones fangosos
Arremolinarme con los vientos,
Como trapos, arrastrar los pies sangrientos,
Antes que ir por ahí...
Si vine al mundo, fue
¡Sólo para deforestar selvas vírgenes,
y dibujar mis propios pies en la arena inexplorada!
Todo lo que hago no vale nada.

¿Cómo, entonces, seréis vosotros
Quienes me daréis impulsos, herramientas y coraje
Para derribar mis obstáculos?
¡Corre por vuestras venas sangre vieja de los antepasados,
Y vosotros amáis lo que es más fácil!
Yo amo lo Lejano y el Espejismo,
Amo los abismos, los torrentes, los desiertos...

¡Id! Tenéis carreteras,
Tenéis jardines, tenéis canteros,
Tenéis patria, tenéis techos,
y tenéis reglas, y tratados, y filósofos, y sabios...
¡Yo tengo mi Locura!
La elevo, como una antorcha, ardiendo en la noche oscura
Y siento espuma, y sangre, y cánticos en los labios...
¡Dios y el Diablo son los que me guian, nadie más!
Todos tuvieron padre, todos tuvieron madre;
Pero yo, que nunca comienzo ni acabo,
Nací del amor que hay entre Dios y el Diablo.

¡Ay, que nadie me de piadosas intenciones,
Que nadie me pida definiciones!
Que nadie me diga: "¡Ven por aquí!"
Mi vida es un vendaval que se levantó
Es una ola que se alzó,
Es un átomo más que se estimuló...
¡No sé por dónde voy,
No sé hacia dónde voy
Sé que no voy por allí!

© José Régio 


miércoles, 17 de septiembre de 2008

LENGUA: USOS Y COSTUMBRES

Si en el instante en que nos figuramos la idea de "nación", nos asalta de manera instintiva la noción de una colectividad determinada que comparte una serie de artefactos desarrollados desde su propia cultura, apelando a lo más profundo de su idiosincrasia para dar sentido a un desarrollo humano, en la gran mayoría de las ocasiones nos quedaremos cortos. No obstante, es cierto que en todos y cada uno de los miembros de una comunidad de individuos, por pequeña que ésta sea, siempre existe un concepto no explicado –no voy a decir innato–, intuitivo de identificación con el grupo en el que cada individuo se representa a sí mismo y se desenvuelve en función del acceso y la intención que se establezcan para llegar a tal fin. Esto, así, de manera desnuda, en teoría no representaría a ojos de la sensatez ningún problema.
 
Puesto que cada comunidad de individuos forma una unidad abstracta, objetiva y a menudo anecdótica, cada individuo se ve a sí mismo de manera inevitable compartiendo su propio universo con otros miembros que también siguen el mismo proceso. ¿Cómo dar entidad de unión a todo esto? ¿Sobre qué bases se fundamenta la cohesión de una comunidad de individuos determinada?
 
Son muchas las maneras, entre las que se encuentra el desarrollo de un sistema legal originado en la necesidad de administrar los bienes o materias primas de las que se disponen para su producción y posterior distribución de manera más o menos equitativa, al margen del método que se emplee, grosso modo. Al mismo tiempo, dicho sistema legal también administra y regula la moral y las creencias propias de esa comunidad al amparo de la creación de instituciones religiosas de la índole que sea (iglesias, comunidad de sacerdotes, hechiceros, consejo de ancianos...), en las que, por supuesto, también se incluye la conducta de los miembros de una comunidad y la manera en que se ha de actuar para posibilitar el funcionamiento de toda esta maquinaria. Para ello, se emplean distintos métodos, como antes esbocé, dependiendo de las características de cada comunidad; pero, sobre todo, hay un instrumento que hace que todo ese conocimiento se transmita entre los individuos que es, aún si cabe, más primordial que el resto: la comunicación lingüística.
Sabemos que hay culturas ágrafas que se arreglan con lo que tienen sin necesidad de utilizar un corpus demasiado complejo de símbolos para sistematizar todo el acerbo que requiere ser conocido por la comunidad. La transmisión oral de individuo a individuo crea vínculos muy sólidos entre ellos que, en gran medida, establecen un cierto conservadurismo muchas veces resquebrajado en función de los nuevos conocimientos que dicha comunidad adquiera. Ni que decir tiene que dicha transmisión viene desde las esferas de la autoridad, o de quien los miembros de una comunidad consideran capacitado para ello: desde los ancianos de la tribu, pasando por una asamblea o consejo donde cada individuo tiene su voz y opinión, hasta la figura de un representante o líder –figura abstracta donde las haya– a quien se ha investido de la capacidad de ordenar en función de habilidades, experiencia o incluso por designio divino o sufragio popular. Hablo, desde luego, a grandes rasgos sin intención de entrar en demasiados pormenores que bien pudieran contribuir a hacer este artículo más arduo y complejo de lo que pretende ser al alejarse del objeto que se pretende tratar.

Las lenguas, como tal, en un principio no son más que un instrumento de cohesión, de identificación grupal, aunque también lo son de discordia, rechazo y segregación entre los miembros de una comunidad dada. Todo esto viene al amparo del uso que de ellas quiera hacerse. Dado que la palabra desde siempre ha sido un instrumento muy poderoso, cada individuo se adscribe a la función simbólica que le interese o que le resulte más acorde con su manera de estar o relacionarse con la comunidad y con la realidad que en ese momento le toca. Es decir, no hay nada aséptico, objetivo, concreto en el uso que se hace de los recursos lingüísticos de una determinada lengua; no se instrumentaliza per se. Su supervivencia, desarrollo, evolución y dinamismo depende no de un grupo concreto dentro de una sociedad de hablantes, sino de cada uno de ellos, al incorporar sus maneras de entender y de verbalizar la experiencia que está viviendo. Así, desde la emoción, surge la poesía cuyo germen es la imaginación. De la imaginación también surge lo narrativo y lo filosófico, ya que se ponen en juego las funciones especulativas y creativas de la mente para elaborar un discurso más o menos efectivo y con una intencionalidad determinada por el espíritu, experiencia y sensibilidad de quien lo emite y recibe. De ahí que haya sociedades que gracias a su lengua de uso hayan conseguido desarrollarla hasta el punto de hacer arte con ella. En otras sociedades apenas se queda en un mero instrumento de transmisión de información acorde con las necesidades que dicha sociedad requiera, priorizando los usos de otros recursos culturales tales como la música, la artesanía, la religión, etc. Esto no hace que una u otra sea más primitiva o más desarrollada que otra, pues dentro de lo que para sus necesidades ha de cubrirse basta y en ocasiones hasta sobra.

Desde esta reflexión, los individuos son relativamente conscientes de que manejan un instrumento para unos fines determinados, cualesquiera que éstos sean y quieran poner al servicio o no de su sociedad. Bien es sabido de la existencia de términos e incluso rudimentos lingüísticos creados por ciertas comunidades para usos específicos, los llamados argots. Es esta facultad creativa de los individuos la que en un momento determinado puede llegar a crear escisiones dentro de la misma comunidad lingüística con la finalidad de identificarse con cierto número de individuos que participan de una serie de circunstancias; son los llamados "sociolectos" que no son más que la adaptación a un grupo de uso mayor que cada individuo hace de su lengua –idiolecto– y de su capacidad para simbolizar el mundo que le rodea. Es una cuestión de afinidad y de afirmación social.

De esta manera, resulta muy interesante la manera en que determinadas sociedades adquieren su noción de "nación". Evidentemente, siguiendo este razonamiento, cada individuo sería una nación en sí mismo, por descabellado que pueda resultar este argumento.
 
¿Qué debemos entender por nacionalismo? Lejos de ser subjetivos con este delicado término, el nacionalismo sería la defensa de los valores culturales, institucionales, éticos, morales, religiosos, etcétera, desarrollados por una comunidad determinada y su voluntad de conservación como manera de identificación y cohesión de los individuos que la forman en un territorio común. Hasta ahí, nada debiera alarmarnos. No obstante, en la historia de los nacionalismos, en la mayoría de las ocasiones, siempre hemos encontrado un elemento común que los refuerza: la lengua que esa sociedad usa en su propio territorio. Este tipo de fenómeno se suele dar en lugares donde conviven –valga, por favor, el término– comunidades diversas cuyo origen, evolución y desarrollo cultural han sido potenciados por una voluntad de identificación muy fuerte con una comunidad cultural determinada cuyo lugar donde habitan es compartido por otras sociedades que se identifican con el resto en mayor o menor medida y con voluntades distintas con respecto a su propia afirmación cultural particular.

El conflicto viene al descubrirse la dirección en que esa identificación se conduce. Hay un nacionalismo integrador que potencia y valora las particularidades y características de las diversas sociedades que comparten territorio. Hay un nacionalismo centralista, en el que se establece un poder central que hace prevalecer la adscripción de la mayoría a un concepto de nación abstracto en el que lo particular es tratado frecuentemente como anecdótico o incluso condescendientemente "exótico" y en el que no cabe bajo pretexto alguno la posibilidad de un desarrollo sano de una comunidad en particular. Luego, y creo que éste es el más odioso de todos los nacionalismos, es el separatista en el que, en aras de una reivindicación exacerbada encabezada por unos pocos pone en pie de guerra a una sociedad determinada en contra de los otros miembros que comparten territorio bajo una comunidad institucional. En estos casos, desde el punto de vista lingüístico, conviene ser cautos. 

La decisión que cada sociedad tome para hacer preponderar el uso de una lengua particular común a un grupo minoritario con respecto a la lengua que se utiliza en todo el territorio bajo la que se unifica e integran las distintas comunidades ha de manejarse en un contexto abierto y no sellado para el resto de los miembros del territorio con los que se convive. En la mayoría de las ocasiones, los que enarbolan la bandera de su unicidad o particularidad por poseer una lengua que los identifica, son también conocedores de la lengua común que se utiliza en el territorio. Nunca desde la imposición ni desde la segregación podrá una comunidad crecer y desarrollarse más allá de lo que sus dirigentes quieran si continúan aferrados una idea soberanista trasnochada y poco meditada. Si se considera una amenaza el hecho de que un individuo ajeno a una comunidad lingüística particular tenga la voluntad de acercarse a ella mediante el estudio de su lengua por las razones que sean, al final, todo quedará en casa y poco a poco, con el tiempo, esa comunidad irá empequeñeciéndose más y más. Caerá en un estado de oscurantismo en el cual se viva de espaldas al resto de comunidades que conviven en el mismo territorio. Tanto es aplicable para unos y para otros: tanto para el grueso que habla y usa la lengua oficial del estado, como para el que habla y usa la lengua oficial de su comunidad. 

Por eso, creo que el concepto de nación no ha de verse más que como algo abstracto, un instrumento más para intentar poner un poco de orden a lo que bulle dentro de un territorio. Cada individuo ha de ser libre de identificarse con quien quiera y de establecer las afinidades que se deseen con una comunidad en particular. Si desde la raíz comenzamos a jugar a dinamitar la voluntad individual de integrar y compartir al nivel que sea la experiencia y la cultura de los distintos grupos que cohabitan en un mismo lugar el resultado final será el sinsentido al que estamos asistiendo en muchas partes del mundo. No hay nada exclusivo para nadie. Sí que es positivo defender y difundir unos valores culturales para poder conocernos y acercarnos. Lo que no es positivo es imponerlos para dar un ficticio "valor" a algo que en sí mismo no es más que una etiqueta más y una máscara para seguir andando por este mundo que con más o menos sensatez hemos ido armando desde que nos pusimos de pie hace ya tanto tiempo.

© Javier Mérida 


viernes, 12 de septiembre de 2008

POLACOS DIVERSOS

SKOK OSTATECZNY

umieranie to tylko spadanie
z mont blanc ciała

skok o WSYZSTKO
w zachłanną nicość

z wiarą że po
przkroczeniu barierz istnienia

otworzy się sam
spadochron duszy

________________
EL SALTO POSTRERO

morir es tan sólo caer
desde el mont blanc del cuerpo

saltar por encima del TODO
hacia la ávida nada

confiando en que tras 
pasar sobre los parapetos de la existencia

se abrirá por sí solo
el paracaídas del alma

© Józef Baran

______
WYBÓR

Odejść
zatrzasnąć za sobą wieko milczenia
czy ciągle
podejmować wysiłek od nowa

uwalniać gardło z ucisku
próbować oddychać
wymówić słowo
powiedzieć całe zdanie
zabrać głos
w pośpiechu
nim znowu nałożą knebel

wiem że czekasz
ty
który się wsłuchujesz
przykładasz ucho
do głuchej ściany

________
ELECCIÓN

Irse
cerrar de golpe tras uno la tapa del silencio
o volver
otra vez a hacer el esfuerzo

liberar la garganta de la presión
intentar respirar
pronunciar un vocablo
decir toda una frase
tomar la palabra
con prisas
antes de que pongan otra vez la mordaza

sé que esperas
que escuchas con atención
que pegas la oreja
a esa pared sorda

© Ryszard Kapuściński



martes, 12 de agosto de 2008

PENSAR, SER, SENTIRSE

Elegir. Filtrar la propia esencia a través de un acto que no nos pertenece de manera natural. Ponerle al mero hecho de ser, una llave que abra o cierre las infinitas posibilidades de la existencia. Permitirse no asistir al flujo constante de lo que sucede. Sólo no eligiendo podemos detener ese círculo. Eliges ser bueno, comprensivo, amable; eliges ser malo, perverso, interesado: juzgas lo que pasa sin darte cuenta de que lo que pasa no te juzga, sino que te hace partícipe de ese devenir. ¿Qué somos? ¿Somos realmente? ¿Nos “son”? Lo que queremos decir... “puedo explicarlo todo”, “esto no es lo que parece”... No podemos explicarlo todo. Pero es cierto que esto no es lo que parece. Por eso nos justificamos constantemente. Elegimos pedir perdón por algo de lo cual en nuestro fuero interno, el más íntimo, sentimos que no hemos transgredido. La culpa, el pecado... conceptos que no existen realmente desde el momento que algo remita a otra cosa que no es. No. Sí. Tal vez. La duda. La duda como ruptura, como cisma de nuestro propio artefacto. Somos una herramienta que nos permite ser a medio fuelle, no vaya a ser que se nos apague el fuego de la hoguera que acabamos de hacer. Romperse de una buena vez. Dinamitarse los cimientos al darnos cuenta de que esos cimientos nunca estuvieron. Somos, tan sólo. Tan terriblemente de esa manera. Lo primordial de existir radica en no contemplar que hay un antes o un después... eso son meras maneras de situarnos en un espacio-tiempo absolutamente relativo. Y ese es el gran error. Lo importante es no situarse, tan sólo ser consciente de estar donde se está. El resto es sólo un resto de nuestra concepción de lo que creemos ser. Normalmente, no hay nada de lo que pueda ser pensado acerca de uno mismo que no remita a lo esencial, a nuestra propia naturaleza que no deja de ser más que lo que es.


© Javier Mérida


lunes, 4 de agosto de 2008

UN MUNDO PARA DOS

Tut ki bu tuzlu balıklarda benim yüreklerim çarpıyor
Tut ki gözmün yarısı elmada yarısı kapanık
Tut ki ben beyaz peynirim ben zeytinim
Al
Ekmeğine katık et beni.


Imagina que en estas salazones palpita mi corazón
Imagina que uno de mis ojos está en la manzana y el otro está cerrado
Imagina que soy queso blanco que soy aceitunas
Toma
Cómeme dentro del pan

© Ümit Yaşar Oğuzcan 


viernes, 25 de julio de 2008

ODISEAS

ΙΘΑΚΗ

Σα βγεις στον πηγαιμό για την Ιθάκη, να εύχεσαι νά 'ναι μακρύς ο δρόμος, γεμάτος περιπέτειες, γεμάτος γνώσεις. Τους Λαιστρυγόνες και τους Κύκλωπας, τον θυμωμένο Ποσειδώνα μη φοβάσαι, τέτοια στον δρόμο σου ποτέ σου δεν θα βρεις, αν μέν' η σκέψης σου υψηλή, αν εκλεκτή συγκίνησης το πνεύμα και το σώμα σου αγγίζει. Τους Λαιστρυγόνες και τους Κύκλωπας, τον άγριο Ποσειδώνα δεν θα συναντήσεις, αν δεν τους κουβανείς μες στην ψυχή σου, αν η ψυχή σου δεν τους στήνει εμπρός σου.

Να εύχεσαι νά 'ναι μακρύς ο δρόμος. Πολλά τα καλοκαιρινά πρωία να είναι που με τι ευχαρίστησι, με τι χαρά θα μπαίνεις σε λιμένας πρωτοειδωμένους· να σταματήσεις σ' εμπορεία Φοινικικά, και τες καλές πραγμάτειες ν' αποκτήσεις, σεντέφια και κοράλλια, κεχριμπάρια κ' έβενους, και ηδονικά μυρωδικά κάθε λογής, όσο μπορείς πιο άφθονα ηδονικά μυρωδικά· σε πόλεις Αιγυπτιακές πολλές να πας, να μάθεις και να μάθεις απ' τους σπουδασμένους.

Πάντα στον νου σου νάχεις την Ιθάκη. Το φθάσιμον εκεί είν' ο προορισμός σου. Αλλά μη βιάζεις το ταξίδι διόλου. Καλλίτερα χρόνια πολλά να διαρκέσει· και γέρος πια ν' αράξεις στο νησί, πλούσιος με όσα κέρδισες στον δρόμο, μη προσδοκώντας πλούτη να σε δώσει η Ιθάκη.

Η Ιθάκη σ' έδωσε το ωραίο ταξίδι. Χωρίς αυτήν δεν θάβγαινες στον δρόμο. Άλλο δεν έχει να σε δώσει πια.

Κι αν πτωχική την βρεις, η Ιθάκη δεν σε γέλασε. Έτσι σοφός που έγινες, με τόση πείρα, ήδη θα το κατάλαβες η Ιθάκες τι σημαίνουν.

Κωνσταντίνος Καβάφης (1911)


ÍTACA

Si vas a emprender el viaje hacia Ítaca, pide que tu camino sea largo, rico en experiencias, en conocimiento. A Lestrigones y a Cíclopes, o al airado Poseidón nunca temas, no hallarás tales seres en tu ruta si alto es tu pensamiento y limpia la emoción de tu espíritu y tu cuerpo. A Lestrigones y a Cíclopes, ni al fiero Poseidón hallarás nunca, si no los llevas dentro de tu alma, si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo. Que numerosas sean las mañanas del verano en que con placer, felizmente arribes a bahías nunca vistas; detente en los emporios de Fenicia y adquiere hermosas mercancías, madreperla y coral, y ámbar y ébano, perfumes deliciosos y diversos, cuanto puedas invierte en voluptuosos y delicados perfumes; visita muchas ciudades de Egipto y con avidez aprende de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en la memoria. Llegar allí es tu meta. Mas no apresures el viaje. Mejor que se extienda largos años; y en tu vejez arribes a la isla con cuanto hayas ganado en el camino, sin esperar que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te reagaló un hermoso viaje. Sin ella el camino no hubieras emprendido. Mas ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no te engañará Ítaca. Rico en saber y en vida, como has vuelto, comprendes ya qué significan las Ítacas.

Konstantinos Kavafis (1911)